DANIEL

Tuve el placer de acompañarte a tu pequeño mundo, de inocencia e ingenuidad, estabas tan pasmado al ver el mundo real, tome tu mano y te invite a caminar... - bamos se que eres fuerte- y de pronto me dirijo ahacia un lugar especial, lleno de colores y risas sin parar... mi mundo se llena de recuerdos ya olvidados y quiero estar mas cerca de donde tu estas, tus manos tiemblan de inquietud y sobresaltos... sonrrio al ver tus ojos brillar, saber que existes y que nunca creceras, que eres lo mas puro e inocente en mi mirar, lo tan parecido que somos...

Te confieso que no me gustaria que vieras la cruda realidad, que tus ojos jamas dejasen de brillar, que la luna siga siendo de cristal, que por las noches puedas jugar con las estrellas y que los sueños se puedan desojar, pintando de luces tus deseos...


No voy a olvidar esa tarde, donde tome tu mano y jugamos soñando... MI PEQUEÑO DANIEL...